Sábado 2 de marzo de 2013.
Inicio: 10:00 horas
Fin: 18.30 horas
Distancia: 20 Km
Es esta la VI Travesía del Jurásico, de la Asociación Senderista Pasos Largos, que con tanto cariño
nos prepararon los compañeros Juan
Ignacio, Patri y Miguel Angel Buytrago, que
desde hacía unas semanas ya se iba comentando entre los socios de Pasos
Largos, y que tuvieron a bien de invitarnos a mi amigo Salva y un servidor.
Como en los grandes partidos de la “Champions” fuimos unas 50 personas aproximadamente las que nos dimos cita en el parking cercano a los restos de lo que en su día fue la Venta del Rosario, en la base de la cara sur del Torcal, y es que la ocasión era única, mas aún teniendo en cuenta la nieve caída el pasado 28 de Febrero.
Llegamos todos con puntualidad exquisita, e incluso tuvimos
tiempo de saludar a los compañeros, de
los cuales, había algunos que hacía ya
muchísimo tiempo (años) que no veía, como Ana y Fernando o Juan Carlos y Paqui.
Tras las correspondientes explicaciones del ”comandante” y
sus secuaces inciamos a la marcha a las 10 de la mañana, tomando el sendero
recuperado que parte por la margen izquierda del aparcamiento y que nos llevará
en unos 3 kilómetros aproximadamente, hasta el Centro de visitantes.
El primer hito lo encontramos en un antiguo Cortijo (ya abandonado)
el cual dejamos a nuestra izquierda,
para a continuación llegar a unas vetustas instalaciones mineras
Continuando nuestro ascenso, hasta el primer cerro, donde
volvemos la vista atrás para tomar una panorámica del paisaje de esta zona, donde destacamos lo que sería un
corral para el ganado, ovino de la zona.
El día se presenta bastante nublado y frío, por lo que a
medida que vamos ganando altura, comprobamos como aún se mantiene los restos de
la nevada de los días pasados, para disfrute de todos y en especial de los
amantes de la fotografía.
A nuestra izquierda, a los pies del torcal Villanueva de la
Concepción, pueblo número 101 de la provincia de Málaga, con unos 3500
villanovenses.
Villanueva de la Concepción
Desde el primer cerro vemos nuestro siguiente hito que es un
pequeño espolón a nuestra izquierda, al que algunos llaman “el fraile”, al que
accederemos por su flanco derecho, por medio de un pequeño y empinado pasillo.
"El fraile"
El paisaje kárstico, empieza cada vez a hacerse mas patente.
Sus origines se remontan al periodo Jurásico, hace entre 250 y 150 millones de
años cuando parte de Europa se encontraba sumergida bajo el mar de Tetis. Es en
esta época cuando se origina un proceso de sedimentación de esqueletos, conchas
y caparazones de animales marinos.
"el fraile"
Y poco tiempo después
nos damos casi de frente con la más
emblemática de todas las esculturas de piedra
que podemos encontrar en el Torcal y que sirve de logotipo al mismo: “el
Tornillo”, declarado Monumento Natural, donde aprovechamos para hacer una
pequeña parada técnica, foto de grupo …
"El Tornillo", Monumento Natural.
… y donde tuve el honor de conocer a Manuel Limón. Desde aquí
una vez mas, mi reconocimiento al trabajo en su blog, pues si bien es cierto que se hace por voluntad propia y con mucho gusto, (por lo menos en mi caso) no es menos verdad el enorme trabajo que ello implica, desde selección de fotos, tracks, comentarios, investigación, montaje...y que los aficionados a estas cosillas sabemos apreciar y reconocer. Es su blog, junto con el del Comando Prestón de mi querido amigo Juan Ignacio, uno de los más completos y detallados que conozco de Andalucía en relación con esta materia.
Posteriormente nos dirigimos hacia el centro de visitantes,
aunque hoy no nos detendremos dado el gran número de participantes, y las
características de la ruta prevista. Este centro de visitantes es creado
gracias a la inquietud de los ciudadanos por el medio natural, convirtiéndolo en
uno de los más importantes centros turísticos y educativos de Andalucía, donde
acuden distintos tipos de colectivos, familias, colegios y por supuesto
particulares.
Centro de visitantes
De aquí sale un pequeño sendero que nos lleva al mirador de
las Ventanillas, donde las vistas son espectaculares hacia el valle del Río Campanillas.
Iniciamos un leve descenso por lo que sería la ruta verde (
versión reducida de la ruta amarilla) para posteriormente acercarnos al mirador
del Amonites, donde aprovechamos para tomar nuevas fotos desde la cara sur del
Torcal.
Mirador del Ammonites
Mirador del Ammonites, hacia Villanueva de la Concepción
Tras las fotos de rigor, seguimos nuestra marcha por la ruta
amarilla, adentrándonos en este laberinto de piedra, que aunque parezca todo lo
contrario, está lleno de vida. No es difícil ver especies animales como cabras,
zorros o comadrejas, por no hablar de la riqueza en aves que el torcal alberga.
No en vano, el torcal de Antequera está
catalogado como Zona Especial para la Protección de las Aves ( Z.E.P.A), además
de ser declarado Paraje Natural (1989).
Cabra hispánica en el Torcal.
Venados en el Torcal
Desde el centro de visitantes del Torcal Alto parten dos
rutas (amarilla y verde) de senderismo por medio de las cuales podremos
disfrutar del espectacular paisaje rocoso
y sus caprichosas formas que asemejan figuras como el Tornillo, el
Cáliz, el sombrerillo o el camello.
"El camello"
La ruta verde es de dificultad baja y tiene una duración
aproximada de dos horas. La amarilla es una versión extendida de la verde, con
dificultad media y duración de 4 horas. Es esta ruta la que tomaremos para adentrarnos en el Torcal y disfrutar de su paisaje, donde
tampoco podremos olvidar la variedad de sus especies botánicas, destacando, musgos, líquenes, encinas, quejigos, majuelos, serbales y algún
que otro arce.
Detalle del majuelo
En esta ocasión las rutas son todas de color marrón, debido
al barro que se ha creado estos días por la nieve caída en las jornadas
previas, lo que hace que vayamos pertrechados de buenas botas, polainas y por si acaso, calcetines y calzado de repuesto
en el coche.
En el Torcal predominan las rocas calizas formadas por
sedimentos marinos que han sufrido una lenta pero constante erosión a lo largo
de los años. La acción de la lluvia, la nieve y el viento, han contribuido a
moldear este paisaje kárstico, creando impresionantes callejones como el del “Tabaco”,
así como un gran número de cuevas y simas que hacen de la zona un lugar
perfecto para la práctica de la espeleología.
Callejón del Tabaco
Y es que el torcal se comporta como una gran esponja que
almacena agua de lluvia que posteriormente es liberada al exterior por medio de
fuentes y surgencias, siendo entre ellas el Nacimiento de La Villa, en su cara
Norte, una de las más importantes.
Nos vamos acercando a la cara Oeste del Torcal; por el
camino nos encontramos alguna que otra vaca; es
este tipo de ganadería junto con la ovina, la única permitida en el
paraje.
Nuevamente hacemos una parada breve de reagrupamiento, donde
aprovecho para tomar algunas fotos del Torcal de Antequera, uno de los mejores ejemplos
de paisaje kárstico de toda Europa, que como diría mi amigo Isi, lo tenemos
aquí en Andalucía, nuestra tierra!
Continuamos nuestro descenso hasta salir de la parte del
Torcal Alto, donde tras cruzar una valla, llegaremos al arroyo del Espinazo, a
los pies el Cortijo Cantero.
Cima del Camorro Alto, en la Sierra Chimenea
Cortijo Cantero
Justo aquí, tras cruzar el arroyo, tomaremos a la derecha
por un carril, que nos llevará al Puerto de la Escaleruela, pasando por delante
del Cortijo de los Navazos, y del Poldje de La Nava, que es en realidad una
enorme dolina que sirve de unión entre el Torcal y el Camorro Alto.
Arroyo del Espinazo
Poldje de la Nava
Una vez llegados al puerto de la Escaleruela tomamos rumbo
S.E utilizando un antiguo sendero de pastores, para adentrarnos en el Torcal
Bajo, desde donde comenzaremos un suave pero constante ascenso que nos llevará
a la zona del Camorro de las Siete Mesas
Puerto de la Escaleruela y Camorro Alto
El Torcal Bajo
Por el camino se lesionaron levemente dos compañeras, lo que hizo que se estirase el grupo... aunque con las ganas que tenían y la ayuda de los compañeros, conseguimos todos completar el recorrido.
Es en esta zona del Torcal Bajo, donde se hace más visible
la llamada vegetación rupícula, en las que las especies botánicas se funden con
las grietas de las rocas.
También encontramos algunos antiguos refugios de cabras de
otras épocas, cuando el pastoreo de esta especie aún estaba permitido en el Torcal,
así como restos de antiguas canteras en Sierra Pelada, clausuradas por los años
70.
Antiguos apriscos en el Torcal
A nuestra izquierda, una panorámica de Antequera.
Antequera y su vega.
De aquí sale un carril que nos llevará en breve a la
carretera que sube hacia el centro de visitantes y que pondrá fin a esta ruta
de coleccionista.
Una vez mas, dar las gracias a los organizadores y todos los participantes por el ejemplar comportamiento, al mismo tiempo que aprovecho para desear una pronta recuperación a las compañeras lesionadas.