Alto de Calar y Alto de Miguelejos. Güejar Sierra.



21 de Diciembre de 2013.

Distancia: 20 km
Tipo: Circular
Duración: 8 h approx (con paradas)
Dificultad: Alta 

Para esta ruta debemos dirigirnos a  la localidad granadina de Güéjar Sierra, situada en la vertiente noroeste del Parque Natural de Sierra Nevada. Desde Granada, tomamos la misma carretera que conduce hacia Sierra Nevada y una vez en Cenes, nos dirigimos a Güejar Sierra, y más concretamente al Barrio Alto, que lo tomaremos en una salida a mano izquierda, entre huertos y olivares.
Güéjar Sierra, cuna del Río Genil tiene origen musulmán y es el punto de partida de los principales senderos de media y alta montaña que suben a Sierra Nevada, como la Vereda de la Estrella. En él se pueden practicar tanto paseos a caballo como senderismo o rutas en bicicleta. Sus habitantes, los “güejareños  o azahones” disfrutan de la gran riqueza de sus arroyos de aguas cristalinas, manantiales y fuentes por doquier.
Es mismamente en la Fuente de los Dieciséis Caños (en el Barrio Alto)  donde comenzamos nuestra ruta, a unos 1150 msnm.







A los pocos metros después de nuestra salida nos encontramos con una especie de alberca Natural a la izquierda de nuestro sendero. Seguiremos recto, en continuo ascenso y sin tomar el ramal que nos sale de la derecha, que será el trayecto que tomemos para la vuelta.  Conforme vamos ganando altura vemos a nuestros pies el Embalse de Canales  (1988)



A nuestra espalda  (en dirección Sur) contemplamos las vistas de Sierra Nevada y el Cerro del Trevenque al fondo (2083 msnm) que también hoyamos en 2011.

Hace unos días apenas había nieve, y es que este año está siendo de los menos lluviosos entre los últimos que se recuerdan. Una pequeña nevada en estos días previos, sirvió para vestir de blanco el paisaje para nuestro disfrute.







El desnivel superado en estos primeros metros es de unos +400 lo que nos hace parar en la zona de  Los Parapetos (1750 msn), para recuperar el aliento. Aquí pueden observarse varias trincheras y parapetos de la Guerra Civil.


Desde aquí seguiremos por la cuerda de la montaña en dirección a nuestro siguiente hito el Alto del Calar (1866 msnm)
El día es perfecto en lo meteorológico, no hace nada de frío lo que anima a parar una y otra vez para disfrutar de las maravillosas vistas a Sierra Nevada, y gran parte de su cordada de  “tresmiles”, con el Veleta, El Mulhacén y la Alcazaba entre otros.




La caravana se estira poco a poco en una nueva subida, esta vez más suave para de este modo coronar el Alto del Calar.


Y desde aquí iniciamos el descenso hasta el Collado de La Gitana (1713 msnm), guiados por la mano experta de Don Manuel Manzanares.




Desde aquí vamos a tomar por una pista a la izquierda, en dirección al Cortijo de la Cueva de la Gitana, desde donde iniciaremos la subida hacia el Miguelejos (2017 msnm) con unas paredes impresionantes. La nieve empieza a derretirse en los escaramujos; es un continuo tintineo de gotas cayendo desde los algodonados arbustos.



Las vistas son impresionantes hacia una Sierra Nevada que cambia por momentos, con una nube, rayo de sol o vientos suaves en sus laderas. Es maravilloso poder disfrutar de este paisaje.











Ya en el Alto de Miguelejos (2017 msnm) aprovechamos para comer, mientras Romualdo, el Trovador de la senda, nos deleita con unas palabras en memoria a Lorca.

Aquí ya llega el desmadre total cuando Paco Jaime saca la botella de vino,  la de Anís del mono y la caja de mantecados, y bajo la batuta de Paco Leal entonamos el Asturias patria querida y algún que otro villancico. Es la Quinta del Mono.



Entre risas, bromas y villancicos bajamos hacia el Collado del Alguacil, donde tomamos la Cañada Real de Quentar o de la Peza, contemplando algunos rebaños de ovejas, junto a sus pastores (que curiosamente van a montados a caballo) entre grandes mastines de apariencia tranquila, pero solícitos con las órdenes del pastor.







Entre las ovejas nos encontramos con un carnero que nos mira desafiante… a ver quien es el que se atreve a seguir por la senda…



Llegamos de nuevo al Collado de la Gitana y seguimos por la Cañada Real, perdiendo altura y haciendo una especie de 8 en el trazado de nuestro recorrido total, contemplando algunas formaciones curiosas como este “cabezudo sonriente”


Y ya mas abajo en las cercanías a Güejar algunas ganaderías vacunas y caballar hasta llegar al campo de futbol que rodeamos por debajo, y seguimos el trazado de la acequia  que nos llevará a la alberca natural que vimos al comienzo de la ruta. Son las 18:30 horas.

Y como estamos en Graná! la guinda  o mejor dicho la tapa, nos la ponen en el bar El Mesón, en la plaza del Ayuntamiento, magnifico rincón culinario y mejor servicio de la camarera. Volveremos sin duda.


Feliz Navidad!!!